Gimnasia empieza hoy su andar en la segunda rueda de la B Nacional. Hoy a las 21.05, en Caballito, enfrentará a Ferro Carril Oeste por la vigésima fecha del certamen de ascenso.
Para el "lobo", el objetivo principal pasa por borrar la pálida que dejó en la derrota ante la CAI en Comodoro Rivadavia y al mismo tiempo mentalizar que ahora llegó la hora de la verdad.
Es decir, en esta segunda rueda el margen de error se achicó de manera notable porque se definen los cuatro clubes que pelearán por subir a la "A".
El "lobo" es consciente que debe mejorar para pretender estar dentro de la conversación. Su principal falencia que la primera parte del certamen fue la falta de gol.
Sólo dio doce gritos, siendo muy poco para tener aspiraciones concretas. Eso sí, se trata de una competencia extremadamente pareja porque el líder, Atlético Tucumán, acumula 33 puntos, apenas 7 más que Gimnasia. Lograr una victoria en Buenos Aires es clave.
No hay vuelta que darle. Ferraro realizaría tres modificaciones respecto a los titulares que cayeron en el Sur. Federico Pomba iría por Leonardo Ferreyra; mientras que Facundo Torres ocuparía el lugar del expulsado Walter Zunino.
También se baraja la posibilidad concreta que retor
ne a la titularidad Daniel Ramasco por Mauricio Yedro. Por el lado del dueño de casa, el entrenador José María Bianco cambiará medio equipo e inclusive el esquema táctico. Es indudable que la derrota en casa contra Unión caló hondo en el estado de ánimo de los "verdolagas".
Defender con línea de cuatro implicará estar más resguardado, no quedando expuesto a los eventuales contragolpes de los jujeños. Asimismo confía en que con un enganche definido y dos puntos podrá "lastimar" arriba.
Ambos necesitan ganar sí o sí. No sirve otro resultado. Los "albicelestes" lo saben, aunque el discurso posterior pueda ser diferente si las cosas no salen como se planificaron.
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