Ya fue. La derrota de Gimnasia ante Patronato en Paraná es un golpe que debe asimilarse rápidamente porque no hay tiempo para lamentos. Es que verdad que se trató de un paso atrás en el gran momento futbolístico que venía atravesando el equipo -ocho fechas invicto, con tres victorias consecutivas-, pero también es cierto que de nada sirve llorar sobre la leche derramada.
Estará en el técnico Francisco Ferraro el saber analizar de manera correcta qué sucedió en tierras entrerrianas, el por qué nunca se pateó al arco y sobre todo a qué se debió que jamás se contabilizaron tres pases seguidos.
Un rival aguerrido
Patronato, con un aguerrido mediocampo, hizo bien los deberes y no es un dato menor. Cuando se maneja la pelota, todo se hace más fácil. Y el dueño de casa se sintió cómodo en todo momento.
Y aunque el "lobo" se caracteriza por saber dar vuelta resultados adversos (así fueron sus últimos festejos), la infantil expulsión de Gustavo Balvorín fue determinante. Con diez hombres pareció una utopía alcanzar la igualdad, algo que se dio nomas.
No bajonearse
Sin embargo, el desafío ahora pasa por no bajonearse. Pensar en positivo es fundamental y esperar que los de arriba empiecen a aflojar un poco su marcha. Atlético Rafaela (57 puntos) ganó y sigue en lo más alto.
Hoy completan Unión (54) y Aldosivi (39) en Mar del Plata; mientras que San Martín de San Juan (47) y Atlético Tucumán (46) continúan en el tercer y cuarto lugar. Es decir, el "lobo" (42) se mantuvo en el quinto puesto, pero sabiendo que inclusive sumando de a tres en la próxima fecha no llegará a alcanzar a los tucumanos, que si hoy terminara el torneo estarían disputando una promoción.
Será clave mantener la cabeza fría para barajar y dar de nuevo. El próximo domingo a las 16, en el estadio "23 de Agosto", será el momento de recibir al "tiburón" con la mente puesta en la victoria. De esta manera, se sacará la espina que quedó clavada en Paraná.
Varias bajas
La buena noticia para Ferraro es que podrá disponer de Silvio Iuvalé, Guido Milán y Luis Machado. Los tres purgaron sus respectivas sanciones y están en condiciones de volver a la titularidad. Mientras que las bajas obligadas serán Fernando Lorefice que llegó al límite de amonestaciones y Gustavo Balvorín que fue expulsado frente al "negro" entrerriano.
En tanto, habrá que ver cuál es el grado de gravedad de la lesión de Darío Benedetto, quien pidió el cambio al sentir una fuerte contractura en el isquiotibial derecho.
Si ex Arsenal no se recupera, el DT tendrá que rearmar el ataque con la casi seguro presencia de Jorge Luna, porque los otros puntas netos que podrían acompañar a Sergio Marclay -su presencia es un hecho- todavía no están en un 100 % en lo físico. Es que Antonio Romero, que ya volvió a trabajar a la par de sus compañeros y Guido Di Vanni, todavía no recibió el alta médica, se recuperan de sendas lesiones. Entonces, las miradas apuntan al Semilla para formar dupla con Marclay.
Análisis de Ferraro
El técnico de Gimnasia, Francisco Ferraro, analizó con honestidad la derrota sufrida en Paraná y arengó a sus dirigidos a mantenerse firmes en el objetivo propuesto: alcanzar una promoción.
"Nos duele perder veníamos bien y teníamos una chance muy buena para seguir subiendo, pero Patronato fue un justo ganador por lo hecho en el primer tiempo. Pero quiero destacar la actitud y la entrega de los jugadores en el complemento", analizó "Pancho" tras la derrota del sábado.
No quiso polemizar en cuanto a la expulsión de Balvorín e inclusive consideró que "no fue determinante", aunque todos saben que sí lo fue.
Ferrraro también explicó que les dijo a sus jugadores que "estén tranquilos porque habían entregado todo para revertir la historia, pero no se pudo. Patronato hizo los meritos para quedarse con el triunfo".
Ahora le queda al “lobo” la chance de la revancha y ante su público, que se había ilusionado.
Seguramente que el domingo habrá un buen marco de público con las ilusiones todavía latente.
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